La evolución tecnológica ha permitido que en la actualidad la cirugía abierta tradicional haya sido sustituida en multitud de casos por un abordaje laparoscópico.

La cirugía laparoscópica consiste en la realización de cirugías abdominales a través de pequeñas incisiones previa realización de espacio intrabdominal con la ayuda de gases (neumoperitoneo).

En la actualidad en urología realizamos gran cantidad de cirugías oncológicas (tumores renales, prostáticos y linfadenectomías) y cirugías funcionales (síndrome de la unión pieloureteral, prolapsos de órganos pélvicos).

Existen publicaciones que detallan las ventajas tanto relativas a dolor postquirúrgico como de temprana recuperación postoperatoria sin disminuir los resultados oncológicos y funcionales de las técnicas abiertas tradicionales.